Este importante tratado entre México, Estados Unidos y Canadá ha captado una inversión directa de $83,883 millones de dólares para nuestro país tan solo en los últimos 23 años. Hoy, el T-MEC aporta el 18.3% del PIB manufacturero y el 3.8% del PIB nacional, permitiendo una derrama económica importante; esto ha traído consigo más y mejores empleos para los colaboradores mexicanos y a su vez, mejores condiciones de vida para sus familias.

Podríamos decir que la respuesta está en las cifras anteriores, pero vamos a detallar por qué, el antes llamado “TELECAN”, favorece tan específicamente al sector automotriz y de autopartes.

Nuestra industria impacta 252 ramas económicas; mientras tanto, nuestro país es el 4° productor mundial de autopartes,  el 7° en fabricación de vehículos ligeros que se exportan a más de 100 países, el principal exportador de tractocamiones a nivel mundial y el principal proveedor de autopartes para Estados Unidos representando el 36% del total de las importaciones del país, es decir, cerca de 80 mil millones de dólares para cuando el 2022 finalice.

Es por lo anterior que la industria de autopartes mexicana es la columna vertebral de Norteamérica en general, con una producción anual superior a los 102 mil millones de dólares.

Por si fuera poco, las actualizaciones que ha sufrido este tratado, han traído el nearshoring, una práctica que atrae nuevas inversiones asiáticas, lo cual es bastante favorable para la industria y ayuda a mantenerla en el segundo pilar más importante para economía mexicana, con un superávit de aproximadamente 88 mil millones de dólares, hablando solo del sector automotriz.

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