Por Cecilia SÁNCHEZ

Este 8 de agosto, la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), la Industria Nacional de Autopartes (INA) y la Asociación Mexicana de Distribuidores Automotores (AMDA) se unieron para dar una conferencia de prensa a través de la cual el presidente ejecutivo de la AMDA, Guillermo Rosales Zárate; señaló que en el primer semestre del 2022 se reunieron 32,486 unidades nuevas financiadas, representando 0.9% de avance en comparación con el mismo periodo del 2021, es decir, 2,637 unidades más.

De enero a junio de este año también se vendieron 528,424 unidades nuevas, siendo el 60.3% colocadas a crédito. Considerando tipo de financiamiento y participación de mercado, los vehículos de marca (vinculados a armadoras) alcanzaron el 78.66% con 245,788 unidades; bancos representó el 19.44% con 60,736 unidades y autofinanciamiento, el 1.91% con 5,962.

Por otro lado, la importación legal de vehículos usados de Estados Unidos y Canadá a México, creció un 30% en el primer semestre del año con 109,285 unidades, lo que nos da un total de 30,672 adicionales. Esto representa un 21.1% del total de unidades nuevas comercializadas ese mismo periodo, es decir, 6% más que el año pasado.

Es con base en estas cifras que se estiman más de 200,000 vehículos importados legalmente, y posiblemente más de 500,000 tan solo para finales de septiembre, considerando los ilegales que se regulen a consecuencia del decreto de Andrés Manuel López Obrador.

Al respecto, Rosales señaló que “la situación nos preocupa porque de ampliarse tal decreto estaríamos hablando de una cifra total cercana a las 800 mil unidades integradas al parque vehicular, llegando a los niveles que vimos en 2006 y 2012 con la importación indiscriminada de vehículos usados extranjeros”.

Además, en conjunto con AMIA, INA y ANPACT (Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones), la AMDA prevé solicitar una reunión con el presidente para comunicarle las incertidumbres de los resultados del decreto y para compartir con él los impactos negativos que éste podría tener en la industria.

Sobre los resultados de julio, se registró un crecimiento del 1.2% en comparación con el año anterior, es decir, 83,137 vehículos ligeros sobre los 82,157 del 2021; sin embargo, los resultados siguen por debajo de los del 2019 hasta en un 21.6%; incluso 8% por debajo de junio de este año.

“La incertidumbre en el inventario persiste, así como el embate inflacionario del lado del consumo con un nivel elevado en los índices de precios que reflejan avances anuales tanto en el general (+8.16%) como en el de vehículos (+8.67%), con datos a la primera quincena de julio 2022”, concluyó Rosales con base en que “en el periodo enero-julio 2022, el mercado continúa por debajo de los niveles de venta de 2019 un 19.4%, aún con una importante brecha para la recuperación. La expectativa de venta para 2022, integrando los resultados de julio prevé que el mercado cierre en cifras cercanas a un millón 27 mil unidades, es decir situando aún al mercado en un nivel cercano al alcanzado en 2021, con un avance de 1.2 por ciento”.

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