"Nuestro compromiso es seguir siendo una industria resiliente, con visión global y enfoque en la competitividad sostenible"
—INA
Ciudad de México.- La Industria Nacional de Autopartes (INA), en conjunto con las asociaciones cúpula de automotores, (AMDA, AMIA), informó en conferencia de prensa que, en el primer trimestre de 2025, México ha mantenido su posición como principal proveedor de autopartes para Estados Unidos, con una participación del 43.10% en las importaciones de ese país, por encima de Canadá (9.78%), Japón (7.73) y China (7.60%), alcanzando una producción con un valor total de 28,487 millones de dólares.
Julio Galván, gerente de estudios económicos de la INA, señaló que las autopartes más producidas fueron las partes eléctricas, las cuales representan más del 19% del total con un valor de 5,464 MDD, seguidas de transmisiones y embragues ($2,861 MDD), telas, alfombras y asientos (2,599 MDD), partes de motor (2,320 MDD) y sistemas de suspensión y dirección (1,926 MDD).
Agregó el representante de la INA que durante el primer trimestre de 2025, las exportaciones mexicanas de autopartes ascendieron a 24,825 millones de dólares. De ese total, el 87% tuvo como destino a Estados Unidos, lo que consolida a México como su principal proveedor. Canadá recibió el 3.5%, lo que confirma que más del 90% de las exportaciones del sector se dirigen a Norteamérica. En contraste, las importaciones mexicanas sumaron 16,095 millones de dólares, de los cuales más del 55% proviene de los Estados Unidos. El saldo de la balanza comercial fue positivo, con un superávit de 8,729 millones de dólares.
En el marco de su análisis mensual, la INA presentó un ejercicio hipotético sobre el posible impacto de nuevos aranceles a las importaciones de acero y aluminio desde México hacia Estados Unidos. De aplicarse un arancel del 50%, el impacto podría rondar los 6,289 millones de dólares, dependiendo del contenido metálico de cada autoparte.
No obstante, la organización subrayó que este escenario es preventivo y confía en que los mecanismos del T-MEC y el diálogo bilateral permitan mantener condiciones de libre comercio que han sido clave para la competitividad regional.
“La fortaleza del sector está en su integración, innovación y su papel estratégico dentro del mercado norteamericano. Nuestro compromiso es seguir siendo una industria resiliente, con visión global y enfoque en la competitividad sostenible”, afirmó Galván, agregó que a fin de no afectar la cadena de suministro, es menester un trabajo conjunto con la secretaría de economía y las contrapartes de la INA en Estados Unidos para minimizar el impacto de los aranceles en la Industria. Recalcó que en la INA se trabaja internamente para encontrar proveedores locales, así como la atracción de inversiones al país con el propósito de seguir siendo un sector fuerte que no se vea afectado con los impuestos agregados.