"Cuando tengamos sistemas de revisión y regulación bien definidos, por supuesto que serán una barrera de entrada, porque cualquier vehículo que se pretende importar al país, deberá satisfacer las condiciones establecidas de revisión técnica y así evitar que sigamos convertidos en el basurero automotriz de Estados Unidos"


—Guillermo Rosales Zárate.

 Isa MOZO

La importación de vehículos usados al país, tanto ligeros como pesados de manera desmedida, es un tema que ha preocupado por décadas a la industria de automotores, debido a la afectación medioambiental, económica y en materia de seguridad, que esta representa. El último informe que mostró la ANPACT, pone al descubierto la falta de regularización al respecto, ya que en el acumulado de enero a julio del presente año, han entrado al país 18,551unidades usadas provenientes de Estados Unidos, es decir, que tuvo un aumento de 120.4% respecto al año anterior. Haciendo una proyección, se llegaría a fin de año con la alarmante cantidad de 31 mil unidades.

En conferencia de prensa conjunta con la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores, AMDA y la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones, ANPACT, luego de que Guillermo Rosales Zárate y Rogelio Arzate, los respectivos Presidentes Ejecutivos de dichas asociaciones, presentaran el reporte mensual y acumulado, en la sesión de preguntas y respuestas, abundaron sobre el tema en cuestión.


¿Por qué es tan alarmante la entrada de vehículos usados a México?


"Los vehículos que están entrando al país son desecho de Estados Unidos, se vuelven vehículos chatarra y eso es lo que nos preocupa, porque hay vehículos que ya dieron su vida útil y, mientras en Estados Unidos ya los están desechando, aquí en México los reciben con controles que ni siquiera están bien impuestos. Los vehículos tampoco tienen las revisiones físico-mecánicas para circular, entonces eso también va en deterioro de lo que estamos buscando que es tener vehículos más seguros, más limpios en México. En términos generales si queremos acotar todo ese proceso para que se controle esta importación desmedida y la afectación que esto tiene para la industria terminal, por lo que es un círculo negativo, generando una disrupción en el mercado. Los precios de estos vehículos son muy bajos y el problema de ello es que afecta también el valor de los bienes y del capital de cada una de las personas que se dedican a la transportación en México", así lo señaló el Presidente Ejecutivo de ANPACT. 

Rosales Zárate Agregó que no únicamente en las ciudades de frontera se da este fenómeno, sino en la mayor parte del territorio nacional, en donde se concentra el tráfico, la llegada, la circulación y la operación de vehículos en pésimas condiciones. Estas unidades siguen incrementando la contaminación, los riesgos de accidente, la ineficiencia y el desequilibrio en lo que es la eficiencia de los mercados.

 

Qué soluciones ofrecen las asociaciones en conjunto con el nuevo Gobierno 


En México Automotriz, nos interesa, sobre todo, qué soluciones se pueden encontrar ante esta problemática, es por eso que dirigimos la siguiente cuestión a los directivos: 

¿Habrá un movimiento más fuerte, más firme ante el gobierno federal, a fin de que, después de más de 4 décadas finalmente se pueda frenar y controlar el ingreso de vehículos ligeros y pesados de contrabando ilegal, inseguros, contaminantes?

Rogelio Arzate, comentó que hay apertura por parte de la nueva administración para poder revisar estos temas. "Hace poco pudimos platicar con la administración saliente, ahora es muy claro que la nueva administración trae buenas perspectivas para la revisión de estos temas, pues se entiende muy bien lo que puede afectar a la industria, una industria súper importante como lo es la industria automotriz, ya que representamos el 3.6% del Producto Interno Bruto Nacional y el 33% de la industria manufacturera. Creemos que con esta apertura al diálogo, podemos llegar a un buen puerto Para poder atacarlo de forma adecuada", aseguró. 

Sobre las soluciones a este problema, Guillermo Rosales reconoció que hay "una asignatura pendiente en México y que forma parte de nuestra agenda de interés, es que contemos en nuestro país con un sistema de inspección técnica vehicular de carácter universal y, si bien es cierto que tenemos la Norma 068 de la SICT, que obliga a que los vehículos que cuentan con placas del autotransporte federal a llevar a cabo la inspección de condiciones físico-mecánicas, la realidad es que este ecosistema requiere ser modernizado, fortalecido y que no únicamente se limite al ámbito federal, sino también de carácter universal, también para las placas locales gestionadas por los gobiernos estatal y que incluya no únicamente al auto transporte sino también a los vehículos particulares". Agregó que "cuando tengamos este sistema, por supuesto que será una barrera de entrada, porque cualquier vehículo que se pretende importar al país, deberá satisfacer estas condiciones establecidas de revisión técnica y evitar que sigamos convertidos en el basurero automotriz de Estados Unidos".  

 "Reitero la confianza en que el cambio en la Administración Federal a partir del 1 de octubre, a cargo de la Doctora Claudia Sheinbaum, será una magnífica oportunidad para recuperar el diálogo y que a través de este, como en otros momentos de la historia de nuestro país, podamos construir juntos mejores oportunidades que nos permitan ampliar nuestro desarrollo. Estmos prestos para poder llevar a cabo este diálogo, tenemos una agenda muy definida muy completa construida de manera conjunta por la ANPACT, por la AMIA, por INA, por AMDA y viendo con optimismo al futuro", concluyó. 

Desconocemos las razones político-económicas que siguen permitiendo que este problema se extenda, sobre todo en este último año. Mas creemos que la colaboración entre las Asociaciones antes mencionadas y el Gobierno Federal, así como la implementación de Normativas y Planes de financiamiento que favorezcan la adquisición asequible de un vehículo nuevo entre las empresas y consumidores independientes, permitirá erradicar este comportamiento que ha afectado a nuestro país por muchísimas décadas.